Otro año más. Como quien no quiere la cosa. Trescientos sesenta y cinco días de aventuras y desventuras. Sin grandes novedades en general. Y ahora toca la Navidad de nuevo. Para conmemorar la venida de un buen hombre, que seguramente en el fondo tenía buenas intenciones, pero cuyas ideas fueron espoliadas y pervertidas, nunca mejor dicho, por muchas personas a lo largo de la historia (habida cuenta del escándalo de los legionarios de Cristo y otros muchos que ha habido). Aún a pesar de todo, no puedo negar cierta simpatía por los predicados de Jesús, a pesar de mis convicciones ateístas. Era un buen hombre. Aunque todo sea una mentira muy bien contada, que ha embaucado a la humanidad desde hace dos milenios, hasta que Darwin y Wallace los bajaron del pedestal. Errar es la más humana de las incorrecciones. Quien no yerra no es un ser humano nacido de madre y padre. Y una vez más, en este caso a finales del año 2019 de la era cristiana, aprovecho en primer lugar para agradecer a todos los eclecticomaníacos la atención que brindan a esta web y para desear de corazón una Feliz Navidad 2019 y un Próspero Año 2020. ¡Que la suerte te acompañe en el nuevo año, eclecticomaníaco!